domingo, 3 de junio de 2018

La Investigación en México y su Evolución Social


La investigación en México y su evolución social han estado ligadas a su desarrollo histórico. En este sentido, se puede afirmar que la tradición científica en México comienza en la época de la Colonia.

En el caso mexicano, podemos ubicación  la investigación principal mente dentro de escenarios como universidades, hospitales, industrias, institutos y colegios de investigación especializada de diversas áreas. El organismo que se encarga de impulsar, fomentar y apoyar la ciencia y la tecnología en México es el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología e incluye todas las áreas del conocimiento.

La mayor infraestructura científica de investigación puramente básica que hay en México, el Gran Telescopio Milímetro de la Sierra Negra poblana es de naturaleza tecnológica. Se trata de una estructura destinada a realizar investigación básica, cuyo objetivo es contemplar el cielo y hacer exactamente lo mismo que hacían los filósofos en la época de Tales de Mileto: ver estrellas y saber como es el mundo, el cielo, el cosmos.


Visita México

Durante los primeros años de la ocupación española prevalecen los paradigmas de la ciencia antigua y medieval. Con los años, se van aceptando, casi a la par de Europa, las premisas de la ciencia moderna.



Para finales del siglo XVIII varios sectores, especialmente el sector económico, demandaban el desarrollo del conocimiento científico y técnico.
Pero el tipo de conocimiento demandado requería tomar en cuenta el contexto social y la cultura local. De este modo, la necesidad de independencia de México abarcaba también el ámbito científico.

La investigación en México y su evolución social a partir del siglo XIX

Aunque uno de los propósitos de la ciencia es alcanzar el conocimiento objetivo, el desarrollo de esta siempre ha estado relacionada con los distintos eventos históricos.
Por ello, el análisis de la investigación en México y su evolución social debe tomar en cuenta esta relación.
Muchos componentes de la investigación científica y tecnología actual requieren unas instalaciones y una concentración de recursos inaccesibles para cualquier país, incluso para los mas grandes del mundo. Que requieren la cooperación internacional.

Los primeros años de independencia

Durante los primeros 50 años de la independencia de México hubo una preponderancia del ámbito político. Sin embargo, algunos representantes de la administración pública mostraron interés por la ciencia.
En este período el desarrollo de la investigación estaba vinculado muy estrechamente al proyecto de nación. En esas décadas el ambiente era propicio no solamente para el desarrollo de la ciencia, sino también de la tecnología.
En esa época, uno de los principales promotores de la actividad científica en la nación fue la Sociedad Mexicana de Geografía y Estadística.
Una de las motivaciones primarias de los científicos mexicanos era hacer un inventario de la riqueza natural del país. También buscaban corregir algunos elementos imprecisos de investigaciones precedentes.



El siglo XX

En el siglo XX se evidencia claramente la relación entre la investigación en México y su evolución social.
Durante la primera mitad del siglo México se vio envuelta en un proceso revolucionario. Esto afectó el avance en materia de ciencia y tecnología.

No obstante, la Constitución aprobada el 5 de febrero de 1917 estableció las bases para que se promoviera el progreso científico desde la educación.
Así, las universidades tomaron el papel protagónico en la segunda mitad del siglo. Desde estas instituciones se ha dado impulso a la creación de organismos dedicados a coordinar y realizar investigaciones.
Con esto se logró la institucionalización de la indagación científica en la nación azteca. 

La investigación en México en la actualidad

En la actualidad México es el líder de la investigación en la región latinoamericana. El número de investigadores y de patentes en México se ha incrementado en los últimos años.
Además, también ha crecido la inversión del gasto en ciencia y tecnología. Entre tanto, las universidades siguen siendo las promotoras de los avances científicos en la nación.
Muchos componentes de la investigación científica y tecnología actual requieren unas instalaciones y una concentración de recursos inaccesibles para cualquier país, incluso para los mas grandes del mundo. Que requieren la cooperación internacional.

Es el momento de dar un segundo salto: el de la internacionalizaron y el de la inserción del sistema de ciencia y tecnología de México en el nuevo escenario global y no solamente regional.

Las investigaciones científicas han tenido como finalidad ayudar al desarrollo de la sociedad. Durante los últimos anos, hemos hablado ya de los efectos negativos provocados, por el mal des controlado y excesivo de la tecnología, así como de la falta de prevencion para anticipar y evaluar los impactos de las aplicaciones científicas y tecnologicas.

La investigación realizada por Watson Crick y Wolkins permitio entender la estructura del ADN. A partir de nuevas investigaciones que han ayudado a entender mejor el origen de ciertas enfermedades, así como ha trabajar en su prevencion y cura. Este adelanto ha impactado de manera positiva en la conservacion del estado de salud de las personas, lo que también ha influido en los índices de longevidad y mortalidad, pero como efecto negativo permite la experimentación para promover la mutación de microorganismos, los cuales podrían ser la causa de nuevas y mortales enfermedades.




Otra cadena de efectos destructivos para la humanidad es la provocada por los pesticidas, aerosoles, gases y demás productos industriales.

La consecuencia principal ha sido la contaminacion atmosférica, provocando el llamado efecto invernadero que adelgaza la capa que nos protege de los rayos del sol.

Evolución e impacto de la investigación en la Universidad Autónoma de San Luis Potosí, México. Patrones de publicación y Sistema Nacional de Investigadores


Se presenta el desarrollo de la producción y el impacto de la literatura científica publicada por parte de la comunidad de investigadores de la UASLP de 1980 a octubre 2008 en el Science Citation Index (SCI) y el Social Science Citation Index (SSCI) versión en línea y su relación de los investigadores de esta universidad adscritos al Sistema Nacional de Investigadores (SNI) en el periodo de 1993 al 2010. 

De esta forma, se incluyen tablas y gráficos de los resultados generales y comparativos sobre la producción e impacto de los trabajos publicados, preferencias de publicación, tipo de productos documentales, disciplinas, categorías, idioma, factor de impacto y su relación con los investigadores adscritos al SNI en lo que se refiera a números totales por año, nivel, áreas de conocimiento, género y las entidades académicas de adscripción de los investigadores. Se concluye que las actividades y la literatura científica de la UASLP han entrado en una nueva dinámica, la de mayor crecimiento en toda su historia, con incrementos importantes en el número de sus científicos que son miembros del SNI y en la diversificación de las áreas de investigación.






Se presenta el desarrollo de la producción y el impacto de la literatura científica publicada por parte de la comunidad de investigadores de la UASLP de 1980 a octubre 2008 en el Science Citation Index (SCI) y el Social Science Citation Index (SSCI) versión en línea y su relación de los investigadores de esta universidad adscritos al Sistema Nacional de Investigadores (SNI) en el periodo de 1993 al 2010. De esta forma, se incluyen tablas y gráficos de los resultados generales y comparativos sobre la producción e impacto de los trabajos publicados, preferencias de publicación, tipo de productos documentales, disciplinas, categorías, idioma, factor de impacto y su relación con los investigadores adscritos al SNI en lo que se refiera a números totales por año, nivel, áreas de conocimiento, género y las entidades académicas de adscripción de los investigadores. Se concluye que las actividades y la literatura científica de la UASLP han entrado en una nueva dinámica, la de mayor crecimiento en toda su historia, con incrementos importantes en el número de sus científicos que son miembros del SNI y en la diversificación de las áreas de investigación.

La investigación científica y tecnología actual


Muchos componentes de la investigación científica y tecnología actual requieren unas instalaciones y una concentración de recursos inaccesibles para cualquier país, incluso para los mas grandes del mundo. Que requieren la cooperación internacional.

Es el momento de dar un segundo salto: el de la internacionalizaron y el de la inserción del sistema de ciencia y tecnología de México en el nuevo escenario global y no solamente regional.


Las investigaciones científicas han tenido como finalidad ayudar al desarrollo de la sociedad. Durante los últimos anos, hemos hablado ya de los efectos negativos provocados, por el mal des controlado y excesivo de la tecnología, así como de la falta de prevención para anticipar y evaluar los impacto de las aplicaciones científicas y tecnológicas.


La investigación realizada por Watson Crick y Wolkins permitió entender la estructura del ADN. A partir de nuevas investigaciones que han ayudado a entender mejor el origen de ciertas enfermedades, así como ha trabajar en su prevención y cura. Este adelanto ha impactado de manera positiva en la conservación del estado de salud de las personas, lo que también ha influido en los índices de longevidad y mortalidad, pero como efecto negativo permite la experimentación para promover la mutación de microorganismos, los cuales podrían ser la causa de nuevas y mortales enfermedades.

Otra cadena de efectos destructivos para la humanidad es la provocada por los pesticidas, aerosoles, gases y demás productos industriales.

La consecuencia principal ha sido la contaminación atmosférica, provocando el llamado efecto invernadero que adelgaza la capa que nos protege de los rayos del sol.




México y su evolución social



Hoy en día México se encuentra en el subdesarrollo, a pesar de ser la undécima economía del planeta, tenemos más de cincuenta millones de pobres y la deuda no deja de crecer. Hemos perdido el rumbo. Se puede llegar a pensar que la clave para salir adelante  es el nacionalismo, pero un nacionalismo moderno y con ética. Se requiere refundar el país y retomar los pactos sociales fundamentales.
De seguir como va, la investigación y la generación de conocimiento, salvo casos aislados y ecdóticos, sólo ampliarán las brechas social, cultural y digital y el desarrollo económico y social se alejará más. México ni siquiera cuenta con los recursos humanos para llevar a cabo un despegue científico o tecnológico.

Ante esta situación adversa el escenario es menos aterrador que lo que parece; sólo hay que recordar que China después de la Revolución Cultural no tenía ningún programa de Posgrado. No fue sino hasta principios de los 80 que China graduó sus primeros doctores: Fueron 13 (trece) doctores en ingeniería en 1982.  En 1999 China graduaba ya más de 10,000 doctores por año. Hoy gradúa tantos alumnos como los Estados Unidos y lo ha logrado en menos de 25 años. En México existe la capacidad para formar un número significativo de científicos. (Arredondo, 1984)
Es enorme la población de alumnos inscritos en los posgrados nacionales: 144,000. Desafortunadamente durante 2003, la enorme mayoría de ellos no contaba con beca, ya que sólo se otorgaron unas 13,500 becas para estudios de posgrado en los ámbitos nacional e internacional. A pesar de estas condiciones, es claro que existe el deseo por superarse de los alumnos.
Posiblemente la motivación para la realización de los estudios de posgrado no sea la correcta, pues dadas la enormes dificultades para encontrar un trabajo que sea de alto nivel profesional, o que sea bien remunerado, es razonable suponer que continuar como estudiante es una opción aceptable. Sin embargo, este escenario no es exclusivo de nuestra economía.
Como dice Mario Molina, primer mexicano en ganar el premio Nobel de Química, el principal problema de que la investigación científica no tenga mucho auge en nuestro país, no es la falta de interés, sino la falta de medios y de recursos, como lo hace ver Molina, ya que aquél que esté interesado en seguir con sus investigaciones tiene que ir a donde se le apoye, en este caso, a Estados Unidos.

Su sistema de investigación Hipotético Deductivo que se utiliza en nuestro país y que no sólo se presenta como método sino como el Método Científico. Se reconoce que, en nuestro país, los procesos de investigación social no tienen el impulso necesario para propiciar la formación de profesionales con posibilidades de contribuir, diferencilmente, a la generación de conocimiento científico y que, generalmente, se confunde la investigación con las propuestas para resolver problemas inmediatos.
A partir del reconocimiento de que en la mayoría de los centros de investigación se desconoce que, en nuestro país, actualmente están coexistiendo otros dos sistemas de investigación, conocidos como Dialéctico y Hermenéutico, respectivamente, se proporcionan algunos elementos que caracterizan al sistema de investigación Dialéctico-Crítico.

los últimos años se viene destinado para la investigación, tan solo el equivalente a 0.33 por ciento del PIB, este es sumamente bajo en comparación a países como Chile o Brasil que le dan 1.0 y 0.8 por ciento respectivamente.
Para concluir se puede decir que en México no falta interés, sino que la misma falta de medios hace que los investigadores deserten de su trabajo, hace que pierdan las esperanzas en lo que hacen, pero no siempre es así, aquellos que realmente tienen interés en continuar con sus investigaciones siguen los pasos de Molina. 


Expresa también que los científicos mexicanos están a la altura de los demás científicos en el mundo y alienta a los nuevos investigadores y científicos a que no pierdan la esperanza y busquen continuar con su camino y no se queden a medias.
Desde mi punto de vista, México tiene muy buenas Universidades e Institutos Tecnológicos de los que egresan muy buenos profesionistas, pero, si no se fomenta la investigación desde los principios de su formación, nada bueno puede lograrse en ese aspecto.



La nación como organismo: México


La nación como organismo. México: su evolución social 1900-1902 es el más reciente libro de la maestra Laura Angélica Moya,1 editado por la Universidad Autónoma Metropolitana, Unidad Azcapotzalco, en coedición con el Grupo Editorial Miguel Ángel Porrúa. Se trata del producto de un trabajo de investigación que, a decir de Álvaro Matute, “constituye el estudio más completo que hasta ahora se ha emprendido de la magna obra dirigida por don Justo Sierra” (p. 7), en la que participaron Agustín Aragón, Gilberto Crespo, Ezequiel Chávez, Miguel y Pablo Macedo, Porfirio Parra, Genaro Raigosa, Bernardo Reyes, Manuel Sánchez Mármol, Carlos Díaz Dufoo, Julio Zárate, Jorge Vera Estañol y el propio Justo Sierra entre 1900 y 1902: México: su evolución social. 

La empresa cultural de la que deriva el libro de Moya tiene su génesis en el otoño de 1994, cuando la autora se acerca por primera vez a México: su evolución social durante un seminario sobre historiografía del Porfiriato de la Maestría en Historia de México en la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM, a cargo de Gloria Villegas. Fue entonces cuando decidió abordar en su conjunto esta obra de gran envergadura, cuya extensión supera las mil páginas, y en cuyo contenido se haya retratado el pensamiento de intelectuales que han trascendido las barreras del tiempo, por lo que constituye una joya de la historiografía mexicana. 

La nación como organismo. México, su evolución social 1900-1902 es una obra cuya belleza se puede apreciar desde el diseño editorial; la carátula es una composición elaborada con base en litografías originales de las primeras luces del siglo XX, que se corresponde con el cuidado en la forma y contenido de un libro que reconoce de antemano sus alcances: ser un ensayo sobre una idea en una obra, la representación de la nación como un organismo social. A decir de la autora, en su texto se encuentran tres dimensiones para explicar esta representación: la inicial es la ubicación de los vínculos intertextuales con obras antecesoras a México, su evolución social y de los rasgos generales del discurso histórico de perfil predominantemente positivista, así como una exposición panorámica de las aportaciones del conjunto de los autores de la época. 

Una segunda dimensión dirige la vista sobre los fundamentos de las teorías de la evolución social para evidenciar la presencia de la idea de nación (aunque diferenciada de un ensayo a otro) en la totalidad de la obra; y, finalmente, un tercer nivel que parte de los dos anteriores para explicar los contenidos atribuidos al cuerpo en evolución: la nación. Moya desentraña dos tensiones importantes en la obra dirigida por el maestro de América. La primera de ellas “se refiere a la índole de la obra misma, en la que se aprecia una fluctuante y compleja relación entre historia y sociología, pues engarza un conjunto de discursos históricos en que fueron relatados los más diversos aspectos materiales y en parte culturales del México porfiriano a partir de un conjunto de principios provenientes de las teorías de la evolución”. 

La segunda tensión descubierta fue la existente entre “los autores evolucionistas positivistas, quienes percibieron a la nación como un organismo, y los que desde una óptica erudita y evolucionista pero no positivista orientaron su escritura exclusivamente a mostrar la evolución de la nación en función de la idea de progreso de una entidad hacia la modernidad (la vertiente liberal)”. La autora logra, sin embargo establecer coincidencias, tales como “la consideración de que las reformas políticas y sociales debían inscribirse en el marco legal entonces vigente” y, desde luego, la concepción evolucionista de la nación.






La nación como organismo... se compone de cuatro sólidos capítulos y un apartado final especialmente reflexivo. El capítulo inicial presenta una revisión de las obras que precedieron a México: su evolución social con la pretensión de elaborar una imagen integral del país, desde el Diccionario universal de historia y geografía, de entre 1853 y 1856, en el que participaron Guillermo Prieto, Manuel Payno, Manuel Orozco y Berra y Francisco Zarco, entre otros, hasta México a través de los siglos, dirigida por Vicente Riva Palacio. Al comparar en particular esta última obra con México: su evolución social, Moya encuentra algunas coincidencias entre las dos, desde la forma (por ejemplo, ambas son obras colectivas), hasta el fondo, pues en ambas los autores coinciden en algunos criterios de periodización de la historia de México en época prehispánica, Colonia, Independencia, México independiente y Reforma;2 “ambas obras tuvieron como finalidad la escritura de una historia nacional alternativa al espíritu cosmopolita del iluminismo, los autores de ambas obras compartieron la búsqueda de objetividad y en mayor o menor medida fueron el producto de un romanticismo tardío que pretendió retratar a la nación en pleno proceso de integración”. Y lo hicieron “prácticamente, personificando conceptos tales como la nacionalidad, el derecho nacional, el carácter nacional del pueblo mexicano, entre otros, como fuerzas vitales que operaban como fundamento de los hechos históricos”.